Hoy se cumple una semana de este cambio de ritmo en mi vida, no puedo negar que los primeros días fueron dificiles, llorarte a todas horas hizo que mi imagen y mi vida laboral se vieran afectadas, estuve a un paso de dejarme caer porque eras el pilar que me sostenía...
Te pedí otra oportunidad para ser felices de nuevo, dicen que el amor todo lo puede y quise creerlo, pero la negaste, dijiste que aún no era tiempo y tal vez tengas razón...
Lloré por noches porque no deseaba perderte, te quería aquí como antes, lamentablemente no fue así, lloré hasta que me cansé, todos tenemos un limite y he llegado a él...
Han pasado días no muchos pero si los suficientes, me dado cuenta que el dolor de tu ausencia no se ha marchado, continua aquí rondandome; hasta este momento he sido fuerte, resistiendome a buscarte otra vez, controlo aquellas ansias que me obligan a intentar llamarte pongo el dedo en el número y después recuerdo que no estás conmigo por un motivo...
He recapacitado, mi rostro luce radiante de nuevo (al menos eso creo), tengo una imagen que cuidar y una vida que disfrutar, te extraño muchisimo pero no se si algún día regresarás, la verdad estoy tratando de no pensarte, pero los recuerdos se vienen al instante yo no los llamo, solitos llegan, me encantó el tiempo que pasé a tu lado...
