martes, 21 de junio de 2011

Mis cinco minutos de fama

Cuando me paro ante ti, cierro los ojos y olvido al resto del mundo,
todo se torna obscuro y a lo lejos diviso una luz indicándome que
el camino es seguro, al tocarte pierdo temor alguno,
... es mi momento, es mi turno...

Sigilosamente interpreto cada palabra dulce o rabiosa,
con la pasión que mi alma expresa, la misma que
cada jueves por la noche del aplauso se alimenta,
todo se transforma pero contigo en mis manos lo demás no importa,
es ahí cuando me olvido de tapujos,
de nuevo es mi momento, es mi gloria...

La adrenalina aumenta al sentir que el publico me lanza una mirada,
por ellos mi voz grita al silencio buscando ser escuchada,
intento capturar su total atención porque quiero ser alabada,
... otra vez piso ese suelo, otra vez tomo el micrófono...
otra vez vivo mis cinco minutos de fama.